El buen desempeño de los indicadores adelantados de la actividad en el primer semestre hace prever un mejor crecimiento del consumo privado para la segunda mitad del año. No obstante, el fantasma de la guerra comercial modera el optimismo de los analistas sobre el mediano plazo.

En el primer semestre del año, la inversión privada habría crecido 5,5% y el consumo privado habría crecido en 3,3%, según proyecciones de Apoyo Consultoría. Una proyección similar tiene la consultora Macroconsult, que prevé que la inversión y el consumo privado habrían aumentado 5,5% y 3,4%, respectivamente, en este lapso.

El economista Diego Macera asegura que la principal causa de la recuperación del consumo privado es el restablecimiento de la inversión privada, que se ha dado desde el último trimestre del año pasado, luego de 14 trimestres de caída.

La recuperación de esta última ha permitido que el empleo formal revierta su tendencia negativa, sobre todo en el segundo trimestre del año, y con ello mejore los ingresos de los trabajadores. Según la Sunat, en abril, el empleo formal y las remuneraciones crecieron 3,5% y 8%, respectivamente.

“Lo que hemos tenido en los últimos meses en la variación anual del empleo es muy bueno. No significa que siga así para siempre y que ya pasamos el bache, pero parece que va mejor”, afirmó Macera en el Congreso Anual de Márketing 2018, organizado por Seminarium.

Evolución del gasto privado

RIESGOS
La mejora de los indicadores adelantados ha llevado al Gobierno a anunciar que aumentará a 4% sus previsiones de crecimiento del PBI para este año, al igual que varios analistas.

No obstante, el principal sector que ha dinamizado la inversión privada es el minero, por los mejores precios de exportación de nuestros minerales, con lo cual, la reciente caída de estos últimos –a causa de las tensiones comerciales– pone en riesgo el futuro del consumo y de toda la economía.

Del 5,3% en que creció la inversión privada en el primer trimestre, la inversión minera contribuyó con tres puntos porcentuales.

Eduardo Jiménez, analista senior de Macroconsult, sostiene que el riesgo de la guerra comercial existe y es una de las principales limitantes de un mayor optimismo sobre las proyecciones. De acontecer esta no solo afectaría al PBI sino al 40% de la población que es clase media vulnerable y al más de 20% que es 
pobre.